Después de haber asombrado al mundo con la motocicleta de célula de combustible con la Crosscage, en el Salón de Tokio 2007, Suzuki ha decidido seguir trabajando con esta tecnología, aplicándola ahora al Bugman, todavía en fase de prototipo.
La célula de combustible refrigerada por aire es muy ligera, compacta y estructuralmente sencilla. Un tanque de hidrogeno de 70 Mpa (el tanque de presión más alta empleado hasta la fecha en un motocicleta) permite una gran autonomía, además el tanque se ha colocado sobre un chasis reforzado para una mayor seguridad. Con este prototipo, Suzuki apuesta claramente por una nueva línea de motos ecológicas de uso urbano, sin duda el futuro de las motos urbanas en busca de las “emisiones cero”.